El montaje cósmico - Paul W. Fairman
La luz azul llameó más allá de Pelham Woods. Fue vista por varios de los muchachos que haraganeaban frente a la barbería en la calle principal de Kensigton Corners. —¿Qué diablos ha sido eso? —preguntó uno de ellos. —Un rayo bajo. ¿Qué otra cosa podía ser? —No parecía como un rayo. Se mantuvo demasiado tiempo. Además, no hay nubes ahí arriba. —Puede que haya algunas nubes bajas que tú no puedas ver debido a los árboles. Sam Cárter, fresco tras su afeitado de la tarde, salió de la barbería y dijo: —¿De qué estáis discutiendo, amigos? —Acabamos de ver un platillo volante. Sam sonrió. —¿Sólo uno? Nadie tiene derecho a jactarse de ello en estos días a menos que vea como mínimo seis. Y al menos tienen que arrojar luces de cinco colores distintos. —Éste sólo era azul. —Yo siempre he preferido los amarillos. Los chicos sonrieron. Sam miró al otro lado de la calle y llamó: —¡Lee! Espera. Voy contigo. Lee Hayden, un hombre grueso y de rostro agrio, se detuvo y aguard...