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El vivo al gozo - Dezohara Bollstadt

Hoy asistí al funeral de un conocido, ni siquiera era amigo cercano, así, apartada del evento, pude observar el comportamiento de las personas. En principio el amigo que me avisó necesitaba de compañía y me “invitó”; en ese caso no me pude negar, porque me lo pidió: “Acompáñame”. Moví mis “principios” de amistad y fui con él, para esto debo decir que ODIO, con mayúsculas, ir a funerales y mucho menos asistir al entierro. Son eventos que no puedo sobrellevar. Cuando pasé por mi amigo a su casa, no le di el pésame, sólo lo abracé y nos fuimos al velatorio. El conocido era su primo, creció con él, eran casi de la misma edad. El primo se convirtió en difunto por quedarse dormido cuando conducía su auto. Mi amigo al que bautizaré Pablo, siempre se quejaba de su primo por ser necio y meterse en problemas, pero se divertía mucho con él, porque era “el alma de la fiesta”. La mamá de Pablo, lo detestaba, era una mala influencia para su hijo: vago, flojo, sin trabajo fijo y ella sabía qu...

Rincón de la poesía: Dolor - Sivela Tanit

  El dolor puede ser tan instantáneo como el voltear de una página, o tan largo y agudo como la respiración de un agonizante. El dolor puede ser también una agonía que se lleva como una ligera capa de seda, es algo que está allí y no sientes su peso, sólo el nudo en tu cuello que te ahorca y te limita. El dolor es tan profundo como los pensamientos de un filósofo o tan ligero como la brisa del viento sobre pétalos de rosas. El dolor tiene muchas caras, puede curarse con las dulzura de una cálida voz o incurable como una cicatriz. El dolor es un mar sin vida, es la agonía eterna de un corazón mancillado, es el eterno día que se recuerda con agonía. El dolor es resbalarse sin levantarse, es buscar una mano amiga y mirar la sombra del inmenso vacío de tu perfil. Mi dolor es tan infinito que nunca alcanza el olvido, es la amargura sin secar que siempre está en mis labios, es cada lágrima que nace de la palabra, es mi agonía que recuerda tu cuerpo, es la añoranza de volver a...

Día de las madres - Dezohara Bollstadt

El día de las madres, desde mi perspectiva, es un día bastante hipócrita. Porque todo se hace con la intención de festejo por la madre, pero yo miro más allá, los 364 días restantes. Hace muchos años leí que una mujer amaba tanto a su madre, que cuando ésta murió, luchó porque se instaurara el día de las madres, su batalla fue ganada, los primeros años todo estuvo bien hasta que esta misma mujer se dio cuenta que ese día era muy comercial, las empresas se había adueñado de la festividad y vendían cientos de productos en nombre de la madre. Entonces ella sintió que su mamá volvía a morir y luchó para que se quitara, sin embargo, esa guerra sí la perdió. Los regalos para las madres, casi siempre eran electrodomésticos, por fortuna, a esa costumbre se le han añadido objetos personales: celulares, joyas, flores, vestidos, zapatos; o invitaciones a comer o paseos; por supuesto nunca faltan las “fiestas” para ella en su casa. Los electrodomésticos y las “celebraciones” caseras son los ...

Abejas - Dezohara Bollstadt

 Hace mucho tiempo tuve un día que he nombrado “De abejas” recuerdo trabajar en mi estudio, mientras me concentraba en mis clases on-line, escuchaba un zumbido en la ventana, no le presté atención, pensé que una mosca grande se había metido a la habitación y se golpeaba contra el vidrio. Por supuesto que se me hizo extraño que ninguno de mis tres gatos estuviera tratando de cazarla, siempre lo hacen, cualquier bicho, hormiga, araña, mosca, etc., siempre están al acecho. Mucho rato después vi de reojo que la "mosca" pasaba cerca de mi cabeza, la miré de fijo cuando se atravesó frente a la pantalla de la computadora y no vi una mosca, sino una abeja volando sobre mí, me sorprendió un poco, pensé en abrir completo el vidrio de la ventana para que solita se saliera, sin embargo, vuelvo la cara a la ventana y hay como diez abejas ¡por dentro! Fue el mayor susto de mi vida, sé manejar una abeja, ni caso hago, pero cuando vi que eran un puñado, me asusté. Lo primero que hice...

Rincón de la Poesía: Célula - Sivela Tanit

 Te encontré aquella vez y supe que te quería. Eras el príncipe de mi vida, eras el amor de mi sueño cauteloso, escondido en la espera. Me besaste por primera vez y tu rodilla tocaba el pasto húmedo. Tus palmas las mostrabas al viento y te creí. Como la verdad en los ojos de la inocencia pura. Nos vimos las mismas veces que hay de diversidad en los pájaros y nos acariciamos la misma cantidad de plumas en sus cuerpos. Llegó el preciso momento de la verdad, donde el sueño cunde y es fuerte la ansiedad de la voluntad. Toqué la esperanza, realicé el viaje a la inmensidad del universo. Regresé de mi camino y tu tomas otro mucho más lejos… quedó en mí la semilla del desengaño sin arrepentimiento, de la novedad del descubrimiento y ahora la historia de ese encuentro queda así. El destino no sabe mi camino y yo me pregunto ¿Es obvio lo que pregunto? Mi corazón llora y pierde la esperanza. Mi cuerpo tiembla de soledad. Mi alma cómo la célula muerta de nuestro amor. Sabe que todo es oscurida...

Rincón de la poesía: Avellana - Sivela Tanit

Mi vientre tibio palpitaba con tu corazón me dio miedo saberme tierra sembrada. Te vi, semilla, echar raíces. Cambiar. Crecer. Anidarte. Llamaste a tu nacimiento una madrugada de luna oculta. Mi vientre se abrió    ¿y tú?             Silencio Mi angustia             ¿y tú?             Silencio Mi histeria               ¿y tú?             Silencio Mi dolor…                     Y tu vocecilla como aleteo de mariposa. Cinco semanas coincidió nuestro hado. Tus ojos color avellana iluminaban tu piel como crisálida. Era tarde. Tu último aliento escapó. Cesó tu corazón Mi vientre gritó en amargura mi cuerpo era como resentimiento vivo. Nos abrazamos tu padre y yo    ...

Nuevas reglas de física - Dezohara Bollstadt

Hace tiempo tenía un vecino al que calificaría de controlador. Hoy lo recordé por un evento singular. Este vecino a primera vista, era acomedido, amable y su eslogan era: “yo me llevo bien con todos”, por supuesto, quienes lo trataban únicamente en fiestas o de pasada, era el personaje más encantado de la historia, pero yo, que lo trataba diario, logré ver su “lado oscuro”. Era tan controlador que si te prestaba cosas tenías que usarlas de la manera como él dijera o se enojaba; si tomabas un DVD o CD por curioso, debías dejarlo en el orden alfabético que él tenía; al colgar la ropa los ganchos o pinzas debían estar a cinco cm. de distancia uno de otro; aparte de muchas otras cosas, tenía teorías que desafiaban la física. A mi directamente me dijo que el aceite se hundía en el agua. Lo cual me causaba un golpe a mi realidad, sobre todo por mis clases de ciencia donde estudiábamos la densidad y con mis propios ojitos vi que siempre flotaba el aceite sobre el agua. Un día, me vio en el pa...

Rincón de la poesía: Paz - Sivela Tanit

Hace tiempo decidí olvidarte y hoy lo logré. Hoy miré al cielo y ya no vi tus ojos, sentí al viento y no recordé tus labios, escuché la tierra y no oí el latir de tus palabras, mi piel percibió el calor del sol que borró el tacto de tu cuerpo… He nacido libre y puedo morir libre surcando con mis alas el brillante mar de cielo. He nacido para sentir el amor y lo he dado. He dado la vida y ella me ha dado sabiduría. He dado la muerte y ella me ha dado la paz.

Rincón de la poesía: Reflexiones - Sivela Tanit

A veces la oscuridad del corazón es igual de grande a la de una profunda cueva, a veces no oyes ni sus latidos. En otras ocasiones las emociones del corazón son como un diluvio en el mar, son una sinrazón, también pueden ser como el aire en el desierto; o una estrella nocturna que se repite a sí misma en los cuatro puntos cardinales confundiendo a la mente y a la propia vida; igual pueden ser como la sal del mar, se prueba pero no se ve. Así es la lucha de mis emociones en mi pensamiento. Confuso y loco. Hundidos en miedos que no existen. Y deseo, desearía… encontrar la paz y la sabiduría para aprender a vivir. Ser la tranquilidad y la libertad. Quiero ser el sonido de la campana lenta y perezosa, monótona, perdida en las ruinas dentro de un bosque. Sin pasos, sin ruido, en el silencio cálido que proviene de amarse a uno mismo. Como sonido correr con el viento, jugar con el riachuelo… Y despierto. No hay silencio, sólo oscuridad y abismo.  

Responsabilidad - Dezohara Bollstadt

Hace muchos años vi una película “The Craft”, que en español la titularon   “Jóvenes Brujas” lo que me gustó de ella es una cita que en ingles dice: “When you open a floodgate, how do you undo it? You unleash something with a spell. There is no undoing. It must run its course.” Pero en español hicieron la traducción: “La compuerta que abres no la puedes volver a cerrar, porque ¿Cómo detienes toda el agua que sale de ella?”. La idea en general habla sobre las acciones y la responsabilidad. Siempre he sido partidaria de asumir las consecuencias. Y he notado que no todos los que conozco pueden hacer eso, algunos tienen acciones y piensan que pueden ir por la vida sin recibir una repuesta, eso me asombra, lo inocente que las personas pueden ser, o lo ególatras, al pensar que eso no les pasa a ellos. Sea cual sea la acción realizada, hay una consecuencia. Aunque me gustaría diferenciar el concepto “consecuencia” de “justicia”. A veces, una persona que es observadora de eventos n...